Corazón que sólo late.
Ya no duele, ya no siente.
Severos daños en el pasado
que ya lo han endurecido.
Impasible reacción que protege,
que alivia el dolor.
Insensible corazón
que golpe a golpe aprendió a no sufrir.
Es la indiferente naturaleza,
del que a estas alturas
ya no necesita sentir amor.
-Ana María Otero-
👏⚘
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MUY BUENO ANA
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Gracias Pippo
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Muy lindo tu poema, se nota la tristeza de ese corazon.. saludos!
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Gracias por leerme y compartir tu opinión 🙂
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