Decir que sí, decir que no.
¿Qué más da si seguramente no es real?
Venir o marchar, pero nunca parar.
Todo nuevo, nada igual…
¿Cuán seguro estás?
La verdad, la mentira,
al mezclarse ya da lo mismo.
Hablar por hablar,
intervenir porque sí.
Opiniones innecesarias,
proponiendo soluciones usadas
que ahora se sabe que entonces no sirvieron de nada.
Escapar para volver a llegar.
Reconstruir el innecesario muro que acaban de dinamitar.
¿Para qué?,
¿para que de este modo todo aquello vuelva otra vez?
Me aparto, no me implico.
Para esto mejor no contéis conmigo.
-Ana María Otero-
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Voy a tener que pensar dos veces para opinar. A lo mejor me apartas de tu blog. Se disfruta leerte.
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no entiendo por qué dices eso
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Era para echarte una broma al estilo venezolano. Disculpa si me salió mal.
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👍😘
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El jose, es un adjetivo que se utiliza para todo. Cuando visitas seguido la casa de un amigo, dices, No jose, ya no te digo que esta linda tu casa, porque de seguros que me vas a botar.
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~…saber cuando se vuelve un circutito y decidir poner un final. Buena forma de expresarlo.~
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lo cierto es que tantas veces sobran las palabras y las opiniones de otros. Pero la vida te enseña que menos siempre es más,querida Ana. Todo cambia de un día a otro y todo vuelve a su normalidad. Sabes que te aprecio mucho. Te leo. Te escucho😘🤗🤗🤗
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Pero sobretodo….te aprecio.
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El aprecio es mutuo, Vicente 🙂
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👏👏👏
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😘😘
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👏👏👏❤
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😊💟
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Escribes muy bien Ana María, haces pensar, conduces a la reflexión, muy buena entrada.
Un abrazo⚘
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😘
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