Nuevas normas que cambian las cosas, porque pasó el tiempo. Pero yo me despisté y sin querer no avancé.
Rezagarse sin ser consciente, hasta que uno alza la vista y mira al frente, encontrándose entonces perdido porque se quedó dormido, y sin él todo se ha ido.
Pero ya está bien, ahora toca correr. Sé que debo llegar y otra vez ocupar mi lugar. ¿Será tarde? No lo sé, pero esta vez no dejaré de avanzar y cuando lo alcance intentaré acomodarme y si al principio me cuesta, en ningún momento me quejaré, aceptando lo que venga, porque lo que sí sé es que esas son las consecuencias de olvidar que vivir es algo más que sencillamente existir.
